México. -En pleno equinoccio de primavera, un turista de nacionalidad alemana fue agredido por visitantes y comerciantes locales luego de que desobedeciera las normas de preservación al ascender a la pirámide de Kukulkán en Chichén Itzá, Yucatán.
El acto ocurrió durante el fenómeno del descenso de la serpiente emplumada, un evento sagrado y de gran importancia cultural, lo que incrementó la indignación de los presentes.
La estructura, considerada Patrimonio de la Humanidad, tiene el acceso restringido desde 2008 con el fin de evitar su deterioro.
El visitante ignoró las advertencias del personal del INAH y, pese a los gritos de desaprobación, escaló la pirámide, lo que provocó que al bajar fuera confrontado, empujado y finalmente golpeado por algunos presentes antes de ser retirado por las autoridades.
El turista fue puesto a disposición de la policía turística, mientras el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reiteró que subir a zonas restringidas puede acarrear sanciones administrativas y legales, además de poner en riesgo la conservación del sitio.