Barranquilla, Colombia. -Una estremecedora historia ha sacudido al barrio El Rebolo, en Barranquilla. Erika Yamileth Rueda, una joven madre de 27 años, fue asesinada brutalmente por su expareja minutos después de llevar a su hija de 6 años al colegio. El agresor la venía siguiendo desde hace días, aprovechó que la pequeña estaba en clases y la atacó con un arma blanca, propinándole 14 puñaladas que acabaron con su vida en plena vía pública.
Erika había denunciado en múltiples ocasiones el acoso, las amenazas y la violencia de su expareja, pero su clamor por ayuda nunca fue atendido con la urgencia necesaria.
Familiares afirmaron que ella ya no quería continuar con esa relación, y por eso él decidió quitarle la vida. “Su hija al salir del colegio preguntó por su mami”, expresó entre lágrimas un allegado, resaltando que Erika era una madre entregada y amorosa.
Este feminicidio deja al descubierto la grave falta de respuesta ante las denuncias de violencia de género y revive el dolor de muchas otras mujeres que hoy viven con miedo.
La comunidad exige justicia para Erika y protección real para quienes aún están a tiempo de ser salvadas.