Villa Duarte.– El dirigente comunitario Rafael Báez denunció públicamente que el niño Josua Rodney, de 11 años, quien perdió la vida tras un hecho violento ocurrido la semana pasada en Villa Duarte, no pudo ser velado, luego de que su cuerpo fuera entregado en una funda negra y en estado de descomposición por las autoridades forenses.
Según explicó Báez, el menor falleció el jueves, pero su cadáver fue entregado varios días después, lo que imposibilitó que sus familiares realizaran el velatorio. Indicó que el retraso se habría producido porque el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) no laboró el viernes, alegadamente porque su personal se encontraba participando en actividades festivas.
La denuncia fue realizada en presencia de compañeros deportivos del menor, niños y adolescentes del sector, quienes se encontraban reunidos junto a dirigentes y comunitarios de Villa Duarte, visiblemente consternados por la tragedia.
Báez también cuestionó el silencio de las autoridades y representantes comunitarios, señalando que la familia de Josua Rodney fue dejada sola en medio del dolor, situación que ha generado indignación entre residentes, quienes exigen explicaciones claras y un trato digno hacia las víctimas.